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Los tiene rabiando, otra masterclass defensiva de Íñigo Martínez y entre silbidos

El defensor vasco, que pasó y surgió por la Real, tuvo un gran partido de central zurdo y volvió a demostrar porque Xavi lo pidió 

Por Pablo Aguilar

El defensor vasco, que pasó y surgió por la Real, tuvo un gran partido de central zurdo y volvió a demostrar porque Xavi lo pidió 

El Barça le ganó a la Real Sociedad por 0 a 1en la noche de ayer en Anoeta, en un encuentro que podría y debería haber ganado el local, pero Marc-André ter Stegen y Ronald Araújo tuvieron otras cosas en mente. Y quien aportó su granito de arena jugando un más que correctísimo encuentro fue Íñigo Martínez que no paró de recibir pitidos cada vez que tenía el balón en sus pies. Y demostró tener un carácter muy fuerte al no ceder ante la presión del Reale Arena que lo que más quería era que se equivocase. 

 

Lejos de suceder eso, Íñigo estuvo muy acertado defensivamente y con el balón en los pies. Es verdad que juzgar esto último cuando el Barça casi no tuvo la posesión es complicado, pero aún así estuvo muy preciso. Tuvo una entrada precisa, dos intercepciones (y una clave que podría haber terminado en gol), cinco despejes, tres despejes de cabeza, una interceptación, 11 acciones defensivas, cuatro recuperaciones, cinco duelos ganados de ocho y el 90% de precisión de pases. 

Además, fue un partido especial para él ya que es surgido de las divisiones inferiores del club vasco, pero la afición no le perdona el hecho de haberse marchado al Athletic hace unas cuantas temporadas. “Duele porque es un campo especial para mí pero lo entiendo, mi salida de la Real no fue muy agradable. Parece que Anoeta todavía no se ha olvidado de mi marcha”, dijo el defensor que  quiso ser diplomático y comprensivo ante los contantes pitidos que se escuchaban en el estadio cada vez que tocaba el balón. 

 

¿Qué decía el papel que le dio Xavi?

Cuando se produjeron los primeros cambios en la segunda parte por parte del Barça, Xavi Hernández le entregó un papel a Íñigo con lo que todos pensamos, eran instrucciones de algún tipo para pararse mejor en el campo con el ingreso de los nuevos. Y la curiosidad fue tal que un periodista de la televisión oficial de LaLiga le preguntó al respecto: “Habían tantas cosas que ni me acuerdo de lo que ponía. No sabía ni qué decirles a mis compañeros”, bromeó el vasco entre risas. 

 

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