Por Pablo Aguilar
Pocas dorsales en el mundo del fútbol son tan icónicas como la número ’10’. Y más aún si en algún en equipo han sido utilizadas por alguien que ha marcado una época o ha dejado una huella. Eso mismo pasa en el Barça con la ’14’ de Johan Cruyff, la ’5’ de Puyol y Busquets, pero también con la ’10’ de Lionel Messi. Que supo heredar Ansu Fati y no de la mejor manera.
Es un número ’10’ que, de momento, pasará al olvido. Y para rematar la faena, ahora se marchará cedido y la dejará vacante para que alguien la use. Muchos especulaban con la posibilidad de que Joao Félix la tome una vez que se convierta en refuerzo, si es que ello termina sucediendo. Pero nos desayunamos que no podrá hacerlo por una normativa en el reglamento de la Federación Española.
“Todos aquellos jugadores que han empezado la Liga con un dorsal ya no lo podrán cambiar. Sólo jugadores del filial que pasen a tener ficha del primer equipo deberán cambiar de dorsal, para llevar una del 1 al 25”, dice la norma. Por lo que ningún refuerzo podrá utilizarla dado que Ansu ya la vistió en este campeonato. Ninguno de los Joao podrán llevarla y quedará vacante hasta el siguiente mercado cuando vuelva Ansu u otro jugador la tome.
Ante la revelación de esta regla que no muchos conocían, los aficionados iluminados con el nuevo conocimiento decidieron plantear un sueño un tanto atrevido. Si sólo un canterano la puede llevar ¿Por qué no dársela a Lamine Yamal? Suena lógico dentro de las normas. Pero muchos otros hinchas no quieren dejarse llevar por la emoción y ponerle un gran peso en la espalda al chico de 16 años que recién está haciendo sus primero pasos como profesional, algo bastante razonable.
29/02/2024
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