Lo trajeron por Messi, la afición lo amó y lo rajaron, De Jong aún ama al Barça

El FC Barcelona ha tenido que recurrir a muchos fichajes ’low cost’ en las últimas campañas que, increíblemente, terminaron resultando de alguna u otra manera. Los casos más claros son los de Pierre-Emerick Aubameyang y Luuk de Jong, quienes llegaron sin coste, marcaron varios goles importantes, se metieron en el corazón de la gente y tuvieron que salir a causa de la mala economía de la institución que no pudo retenerlos. Y el delantero neerlandés todavía sigue queriendo al Barça y así lo demostró recientemente.

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De Jong realizó una entrevista para el medio ’Guardian Sports’, en donde habló de su paso por el club blaugrana y como lo recuerda con gran cariño. A sus 33 años está viviendo una gran campaña con el PSV en donde es goleador del equipo y de la Eredivise, y jugará por Champions esta tarde ante el Borussia Dortmund. Lo trajo Ronald Koeman y explotó con Xavi como entrenador, aunque al egarense no le convencía mucho.

"Después de que Xavi se convirtiera en entrenador, marqué algunos goles importantes y la mayoría de cabeza. En un momento en el Camp Nou cantaron mi nombre en los saques de esquina o tiros libres. No creo que haya nada mejor que eso. Estoy muy orgulloso de ello", dijo el delantero que no pierde razón. Los aficionados sabían que algo podía pasar si había una jugada de balón detenido y él estaba en el campo, ya que nos acostumbró a ello. Lo que le valió que los hinchas aún lo recuerden con gran cariño y celebren lo bien que le va en su país, al igual que pasa con Aubameyang.

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Lo trajeron por Messi, pero no se compararía a él nunca

El neerlandés llegó en un momento extraño en el Barça, ya que en esa campaña se fue Messi del club y el Kun Agüero se tuvo que retirar por causas de fuerza mayor. De Jong llegó al vestuario y le dieron el casillero de Leo, como si fuese el reemplazante y hasta para él fue raro: "Eso fue muy extraño. Por supuesto, no fui contratado como el reemplazo directo de Messi. Nadie puede reemplazar a ese hombre. Llegué allí como ariete. Pero en realidad estaba sentado en su lugar en el vestuario, en su taquilla. Eso estuvo bien".